Hábitos

Hay días que te levantás, y no querés jugo de natanja, café, té, ni nada. Esos días querés un buen vaso de Coca Cola. Hay días que milagrosamente tenés una botella de Coca esperándote en la heladera. Esos días me acuerdo de mi amiga Da, cuando descubrí que desayunaba regularmente con la gaseosa en cuestión, y su respuesta fue la siguiente:

"Trabaje 7 años en Coca Cola, para mí esto es de lo más normal"

SENTINEX

El sentido común se tendría que vender en frasquitos.

EL PENDEJO TRANSADOR

Tendríamos 19 y el tenía 14. Era el PENDEJO TRANSADOR. Así lo habíamos bautizado. Básicamente lo que hacía era agarrarte y transarte: Él te transaba. Te transaba si tenías si tenías 13, 12, 11 no le importaba nada. Verano tras verano, siempre había alguna zorrita que sucumbía a sus encantos. Ya más crecidos todos (el unos 17 y nosotras veintitantos) atravieso la plaza, sola - esa noche había perdido a mi amiga temprano- y la veo, totalmente ebria, sentada en un banquito. A su lado, el PENDEJO TRANSADOR : "Quedate tranquila, yo la llevo hasta la casa", me dice en tono tranquilizador.

Al otro día mi amiga me recriminó haberla dejado sola, borracha, en manos del pendejo. Sus palabras fueron:
"Sabías que me iba a transar, hija de puta"

Perdón, lo tenía que contar.

Jimenita se avalanzó en estado de ebriedad sobre un volquete y confesó:

"siempre me intriga saber que tiran acá adentro"

Cosas que pasan cuando una es tarada

Maldigo no tener talento para dibujar, así él me admiraría, y esos posts histéricos de halagos que buscan otra cosa serían para mí.
Pero no sé dibujar.
Y hay algo peor. Yo sé que nunca me va perdonar (esto fue bastante tiempo atrás) la vez que alguien dijo "Y lo que pasa es que Liniers está de moda" y yo no pude entender como un barrio tan marginal de repente se había puesto tan cool.
Sí, a veces soy imperdonable.

Soñé

Que era una promesa del POLO¿?, y que necesitaba un auspiciante que creyera en mí.

SUPER FREAK; SUPER FREAK

Hablábamos de cómo mi hermana es una "junta mierdas", cuando una teacher amiga suya confesó:

-Bueno, yo también soy de juntar cosas...

-¿Cómo qué?

-No sé, envases de Actimel, ponele... tengo miles...

-Y para qué los querés?

-No sé, pienso que algun día me van a servir.